La idea original y audaz de los vasos de mármol surgió en agosto de 2011 mientras trabajaba en el proyecto Natfuse. Un trozo de mármol cayó accidentalmente y la forma del fragmento resultante se parecía a la parte frontal de un marco. Esto anunció el comienzo de un desafío cada vez más ambicioso y sensacional: forjar el mármol para convertirlo en un accesorio portátil.
Los productos de la industria del mármol generalmente pesan varias toneladas, por lo que el objetivo de crear un accesorio que pese entre 39 y 42 gramos y décimas de milímetro de espesor fue realmente innovador.
Otros materiales utilizados para las gafas son elásticos y maleables, mientras que el uso de inflexibles, quebradizos y pesados. El mármol trajo consigo toda una serie de problemas que hubo que superar.
El proyecto requirió grandes inversiones en el software y la tecnología más modernos, así como la creación de un equipo de artesanos y especialistas que trabajaron exclusivamente en el desarrollo constante del producto, desde el diseño técnico hasta el diseño creativo y el estilismo.
Debido a la complejidad del material en sí, la producción de vasos de mármol requiere una investigación y experimentación constantes, que no son necesarias con otros materiales. Los tipos de mármol seleccionados por Budri se obtienen de canteras de diferentes partes del mundo. Por tanto, procesar un nuevo material significa tener que lidiar con sus propiedades específicas, desconocidas e impredecibles. Para superar estos desafíos, el laboratorio de gafas Budri emplea artesanos, químicos y geólogos experimentados que estudian la porosidad, resistencia, absorbencia y reacción de la piedra.