La colonia Acqua di Genova fue creada en 1853 por el perfumista Stefano Frecceri para la Casa Real de Saboya. En muy poco tiempo, la fragancia gozó de una creciente popularidad y pronto se convirtió en un elemento indispensable de la rutina matutina de muchas familias reales: varias familias nobles y reales europeas de la época la usaban con gran pasión. Dos personas en particular contribuyeron a su gran popularidad y aprecio: Virginia Oldoini y el rey Vittorio Emanuele II. Virginia Oldoini, condesa de Castiglione, era considerada una de las mujeres más bellas de Europa en su época y era conocida por su apariencia, encanto y estilo, sirviendo como modelo a seguir tanto para mujeres como para hombres. Se enamoró de Acqua di Genova e inspiró a muchos otros a usarla. El rey Vittorio Emanuele II estaba tan entusiasmado con la colonia que, el 28 de marzo de 1866, otorgó a Stefano Frecceri el Premio de la Casa Real y lo nombró proveedor oficial de la corte. A partir de ese momento, el avance triunfal de la colonia Acqua di Genova fue imparable: recorrió el mundo, cosechando numerosos premios y galardones hasta el día de hoy. Y aún hoy cuenta con varias hermanas: la línea se ha ampliado para incluir otras fragancias igualmente sofisticadas.